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La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) informó una actualización de los montos de las asignaciones familiares y de la Asignación Universal por Hijo (AUH) que comenzará a regir en enero de 2026. El ajuste se aplica de manera automática en el marco del esquema de movilidad vigente y está vinculado a la evolución de los precios, alcanzando a todas las prestaciones incluidas en el sistema previsional.
En el caso de la AUH, destinada a familias con hijos menores a cargo, el beneficio registrará un incremento respecto de los valores vigentes a fines de 2025. El monto total por cada hijo se ubicará en torno a los $125.500. Como ocurre habitualmente, el 80% se abona de forma mensual, mientras que el 20% restante se liquida una vez presentada la libreta que acredita el cumplimiento de los controles de salud y escolaridad.
Para los hijos con discapacidad, la asignación también se actualiza y supera los $400.000 anuales. El mecanismo de pago se mantiene sin modificaciones, con acreditaciones mensuales y la retención del porcentaje correspondiente hasta la presentación de la documentación exigida. Este aumento tiene un impacto directo en los ingresos de las familias alcanzadas y se vuelve un elemento central para la organización económica de los hogares que dependen de esta prestación.
Las asignaciones familiares del Sistema Único de Asignaciones Familiares (SUAF), que perciben los trabajadores registrados, también fueron ajustadas. En el primer tramo de ingresos, la asignación por hijo se ubica en torno a los $61.000 mensuales, mientras que el beneficio por hijo con discapacidad supera los $199.000 por mes. Los montos finales varían según el Ingreso del Grupo Familiar, ya que el sistema establece escalas y topes que reducen los importes a medida que aumentan los ingresos declarados.
Además de la AUH y el SUAF, ANSES actualizó otras prestaciones familiares, como las asignaciones por nacimiento, adopción y matrimonio. Estos beneficios complementarios forman parte del esquema de protección social y buscan acompañar distintas situaciones familiares a lo largo del ciclo de vida.
El ajuste previsto para enero de 2026 representa un alivio para muchas familias trabajadoras en un contexto marcado por la presión inflacionaria sobre los salarios. Para trabajadores en relación de dependencia, monotributistas alcanzados por el sistema y beneficiarios de la AUH, la actualización implica una mejora relativa del poder adquisitivo al inicio del nuevo año y una referencia clave para la economía cotidiana de los hogares.
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