¿Cómo continúa el conflicto de FADEA?

Editar noticia


La Fábrica Argentina de Aviones (Fadea) decidió prorrogar hasta el 28 de noviembre el Plan Preventivo de Crisis (PPC) que mantiene desde junio, con suspensiones rotativas de personal y una producción prácticamente paralizada. El esquema afecta principalmente los lunes y viernes, con la excepción de quienes cumplen tareas vinculadas a contratos con la brasileña Embraer.

El acuerdo con el Sindicato de Trabajadores Aeronáuticos (STA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) asegura a los suspendidos el cobro del 80% del salario neto como suma no remunerativa, además de aportes sociales, cuotas sindicales y el pago del aguinaldo. También se mantiene el adicional por presentismo para quienes asisten a trabajar.

Déficit e incumplimientos del Estado

El presidente de Fadea, Julio Manco, reconoció que la empresa arrastra un déficit operativo de 2 millones de dólares mensuales y un pasivo corriente de 19 millones. A ello se suma un incumplimiento contractual con la Fuerza Aérea Argentina por el programa IA-100 Malvinas, que contemplaba la fabricación de 40 aviones de entrenamiento pero solo produjo un prototipo, con un desfasaje de 53 millones de dólares.

La crisis impacta también en los proveedores: la compañía acumula una deuda de 16 millones de dólares, que, ante la falta de liquidez, se transformó en un freno para la cadena de suministros.

Ajuste

En el Congreso, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, defendió la gestión al asegurar que los salarios “se encuentran al día” y que “no habrá despidos masivos”. Sin embargo, presentó el Plan de Negocios 2025–2030, que proyecta una reestructuración de la plantilla con una base de 880 empleados, alianzas estratégicas y la posibilidad de una privatización parcial, uno de los puntos más sensibles del esquema.



Compartir esta nota